Big Up! Calles 2015
Por 6 octubre, 2015 17:480


Comienza el Big Up! 2015 y yo, a las 17:30 de la tarde ya estoy perdida por las calles de Murcia con el Google Maps en busca del primer concierto de una larga jornada que promete.
Tras desistir con “a quinientos metros, gire a la derecha” decido llamar a una gran sabia; mi abuela, que en cinco minutos me hizo llegar a mi primera parada.
17:50, Pza. San Juan de Dios, New Jungle:


Mientras unos cuantos preparamos las cámaras y las ganas de escuchar buena música, los chicos de New Jungle ponen a punto sus instrumentos y Juan Antonio calienta la voz. Todos expectantes, mirando relojes, primer concierto de la tarde. La plaza cada vez más llena y por fin las seis.


Comienzan con un tema que capta nuestra atención al momento, el cual en mi libreta de sensaciones describo como “brutal“. Entre guitarras y armónicas aparecen dos violines y un violonchelo que prometen, y que cómo no, no nos decepcionan. Después de un poco de promoción, llega el último tema, en el cual el público toma parte con unas cuantas palmas y algo más importante; sonrisas de satisfacción tras un muy buen concierto.


18: 40, Caballerizas de los Molinos del Río, The Purple Elephants:
Personalmente, comienzo el concierto un poco desconcertada al ver un simple teclado en el improvisado escenario. Cinco minutos después llegan las explicaciones; y es que como el universo no perdona ni una, el pobre guitarrista del conjunto esa misma mañana se había hecho un corte un poco feo en la mano, lo que le impedía tocar.
Teclista y voz comienzan lo mejor que pueden, que no es poco. Consiguen llevar bien el inicio del concierto, pero la simpleza del conjunto duramente podía cubrir nuestras expectativas. Eso unido a que no les tocó la mejor ubicación (a mi parecer), me dejó una sensación agridulce al finalizar.


Eso sí, puntos a favor; temas en español. ¡Que cómo los eché de menos anoche! y una limpieza vocal y musical digna de admirar.
19:20, Mercado de la Paja, The Meatpies:
Nada más llegar se palpa el buen rollo de este grupo. Puesta en escena de diez, que automáticamente nos invita a transportarnos 20 minutos a esos ranchos del Sur estadounidense de los años 20.


Comienza el concierto y el público se hace cómplice. Una voz que llega, una música que sin duda está a la altura.
Tras cada canción, la reunión de peques de primera fila piden otra emocionados y ellos encantados la conceden. Pero todo lo bueno tiene un final. Final que impactó con un principio acapella, palmas del público, niños tocando la batería imaginaria y adultos deseando poder volver a ver pronto a este pedazo de grupo murciano.
20:00, Muralla Árabe de Verónicas, Ayoho:


“Ayoho: Respeto y asombro. La palabra que utilizan los indios de la frontera de Canadá para referirse a la llegada de la primavera”.
Y ni era primavera, ni estábamos cerca, pero los cartageneros nos hicieron sentir ese calor que empieza a asomar tímido tras el invierno. Hablar de buenas sensaciones se queda corto. Crearon un ambiente familiar que nos dejó a todos los presentes sin palabras. Desde su comienzo con el tema “Holding On” hasta el estremecedor “Blank Walls“. Y es que estos chicos a mí me tocan la fibra sensible…




20:40, Pza. Santa Catalina, Alex Tired:
Ya llegando al final, con un poco de hambre y sed; sed de una estrellica de levante y buena música. Comienza un jovencísimo Alex Tired y no termina de captar mi atención. La ubicación tampoco ayudaba, porque como todo hijo de vecino sabe, esta plaza está llena de terrazas y por lo tanto gente hablando. El tema del idioma en sus canciones es algo que me vino teniendo descontenta desde el inicio de la tarde. Personalmente eché de menos el español y en concreto un par de grupos también finalistas de este concurso como Decembird o Bravo Alexei. A pesar de esto, un punto a favor por su original voz, el parche del bombo de la batería y las ganas que le echaron.


21:20, Pza. José Esteve Mora, The Stuffs:


Seguimos nuestro paseo por Murcia y ponemos fin a una gran tarde de música con The Stuffs en una íntima placita llena de gente.
Los miembros del grupo con sus impecables camisas blancas andaban nerviosos, dándole las últimas pinceladas al escenario y comprobando que todo estaba en orden. Empieza el concierto y el uso del micrófono es algo que me desagrada especialmente, ya que cuentan con una buena voz que seguro nos llegaría más al desnudo. Pero a pesar de esto, me hacen ponerle un punto y final más que dulce a este Big Up! ya que su mezcla pop, rock, folk hábilmente utilizada nos tuvo a más de uno intrigados y con ganas de más.


Finalmente, mi Big Up! acabó con un merecidísimo quinto de Estrella que por un momento casi pido al camarero en inglés, ¡por lo visto es lo que se lleva ahora!
Redacción y fotografía: África Bastida.