«Bajo los árboles, donde nadie te ve» de Patrick Horvath

Pues proseguimos beneficiándonos del gusto exquisito que Astiberri siempre demuestra a la hora de escoger sus novedades. En este caso, una que viene algo eclipsada por la publicación que dicha editorial ha hecho, recientemente, de “Anzuelo”, la nueva joya de Emma Ríos. Sólo por este hecho resulta todavía más necesario subrayar esta fabulosa propuesta titulada “Bajo los árboles, donde nadie ve”, que sirve como debut en el mundo del cómic por parte de Patrick Horvath, también guionista y cineasta, disciplinas que, por cierto, ya se intuyen en la medida composición cinemática de las viñetas que conforman este reverso psicópata de la placidez e ingenuidad de las fábulas surgidas bajo la luz de los osos amorosos y otras series antropomórficas de profundo poso infantil.

En este sentido, no sorprende pero sí fascina el uso intenso de los tonos apastelados a lo largo de un cómic en el que su autor ha sabido disponer de una serie de referentes que delimitan un truculento meridiano entre el cozy crime y la más depravada literalidad gore de unos crímenes que, en este caso, abren el portalón al subconsciente de Samantha Strong, ambivalente protagonista total de este cuento donde lo bello se cruza con el horror en primerísimo primer plano.

Dicha disposición argumental fluye a través de una narración donde las contradicciones de la supervivencia a toda cosa afloran en el ADN narrativa de un relato en el que también aflora el rechazo al niño interior de Samantha, lo cual sirve para poder armar una trama con tintes humanistas, por otro lado, confeccionada con tal mimo que a su autor le ha valido ser nominado a los premios Eisner 2024 a mejor serie nueva.

Más allá de todo merecido elogio hacia este cómic, lo que sobresale, por encima de todo, es el descubrimiento de Horvath, quien con este título se ha puesto el listón muy muy alto para sus próximos, y ya esperados, movimientos dentro del noveno arte.