Y así fue la autodestrucción de Second en Granada

El 29 de octubre era la fecha.  Planta Baja, el lugar. Second, el grupo.

Desde que empecé a vivir en Granada a finales de septiembre, estaba deseando que llegara ese día, y no sé especificar si era por ver a Second en directo una vez más después del gran espectáculo que dieron en Sonorama, o porque estaba ansiosa por conocer la mítica Planta Baja de la que tan bien me habían hablado.

Llegue muy temprano, así que tuve tiempo a ir a tomarme una cerveza con su famosa tapa al bar de la esquina.

Por fin abrieron la sala, tuve que pelearme un rato con el portero para que entendiera que estaba pidiendo la lista de prensa, pero parece que al final encontró mi nombre entre esos otros dos que había.

”¡Qué sala más bonita!”, ”¡Qué cuartos de baño más elegantes!”, ”¡Qué cervezas más caras!” y una larga lista de primeras impresiones empezaron a darme sed y empecé pagando bien caro por la primera cerveza.

Si no habéis estado nunca en Planta Baja (igual que yo hasta hace tres o cuatro días), el acceso a la planta baja del edificio (tiene dos plantas) es maravilloso, guapísimo. Un túnel iluminado con unas luces azules, muy retro. Ahora, la planta baja del Planta Baja, valga la redundancia, es un antro. Un antro con un escalón por escenario por culpa del cual no se ve un pimiento del escenario si no estás en primera o segunda fila, con dos columnas enormes repartidas por la sala que tapan la visión de buena parte de la sala, una barra casi en la mitad de la sala… A mí me pareció todo un poco caótico, pero no terminó aun de perder el encanto.

Second traían teloneros, y ellos eran un grupo murciano llamado Noise Box. Como su propio nombre indica hacen una especie de Pop Rock Noise muy bailongo y divertido, a veces siniestro, a veces lentito. Desde mi punto de vista es un grupo que merce 30 o 40 minutos para que lo oigamos, son bastante buenos y divertidos.

Por fin sale Second. Empiezan el concierto con el batería y el bajo tan sólo sobre el escenario, van incorporándose poco a poco los demás músicos, aunque Sean Frutos no aparece hasta que no le toca actuar. La canción ya se reconocía; abrieron el concierto con  ‘‘Mañana es domingo’‘, una entrada espectacular. Ante las palmas y los coros de la gente, Second estuvieron muy a la altura de todos los grupos que han pasado por Planta Baja.

Nos continuaron deleitando con temas de su último disco como ”Autodestructivos”, ”Psicopático” o ”Muérdeme”; así como del disco ”Fracciones de segundo”, que, como no, tocaron ”Rincón exquisito” o ”Conocerte”.

Una canción muy pedida por el público fue ”Más suerte”, que gracias a la insistencia conseguimos que la tocaran. Fue grandiosa, nos introdujo en una atmósfera sonora muy particular.

Los chicos murcianos se atrevieron a tocar una de sus antiguas canciones en inglés, y la elegida fue ”Why not?”, y no se equivocaron en su elección.

Con todo, al final del concierto, mucho calor, mucho sudor, mucho bailoteo y demasiada pasión por todos lados, salí de la sala, aunque 30 minutos después volví a entrar porque me comentaron que celebraban una fiesta los chicos de Jaggermeister llamada ”Mordisco”, con motivo de la proximidad de la noche de Halloween, así que así terminó mi noche. Un concierto bonito en un rincón exquisito, pero sin cervezas de más en el cuerpo, que no está la cosa para tanto.