Noche fría de Dj Shadow en Madrid
Por 30 octubre, 2012 12:240




Sensaciones enfrentadas conla vuelta de Dj Shadow a Madrid, con una sesión que no terminó de cuajar.
El pasado domingo, un día marcado por la vuelta al horario invernal y el frío, acudimos al Matadero de Madrid para ver la actuación de todo un clásico en la escena electrónica internacional: Josh Davis, más conocido como DJ Shadow. Aterrizó en la capital para presentar “All Basses Covered”, set que viene presentando por medio mundo y en el que presentaba una selección alejada de sus producciones. Y había expectación, porque el músico californiano llevaba más de cuatro años sin pisar el asfalto madrileño.


Antes de hablar de lo que fue la noche, hay que recordar que la carrera del artífice de Endtroducing… o The Private press, discos que forman ya parte importante de la historia de música del siglo XX, ha venido sufriendo altibajos incluso con sus últimos trabajos, véase “The Less you know better”, donde público y crítica han vuelto a darle la espalda.
Davis vino a presentarnos un set por el que se pasearon diferentes estilos, hubo hip hop old school, dubstep, jungle, drum´n´bass.. todo ello basado en lo sonidos graves y bajos, con marcados beats, como punto de encuentro de la amalgama de estilos, que a ratos te hacía pensar si que quien estaba al mando de los platos y parafernalia habitual era el mismísimo DJ Shadow. Hay que decir que los habituales vinilos se cambiaron por CDs, cosa que desconcertó en algún momento.
Hubo de todo durante la casi hora y media de espectáculo. Las bases del californiano, que lanzaba con baquetas, se mezclaron con scratches arrebatadores, breakbeats pero hubo algo que a los presentes desconcertó. Davis se afanaba en coger el micro asiduamente y por gustar a todo el mundo. Davis quiere cogerle el pulso a la escena pero no da con la tecla.
El mejor momento de la noche para los nostálgicos fue el ya mítico “Organ Donnor”, pieza insigne que dejó un gusto a melancolía casi al final del show. Está claro que Davis ha madurado, para bien o para mal. Quizás de alguien como él siempre esperamos lo mejor.